Andan revueltos estos días los internautas por la reforma que impulsa el Ministerio de Cultura para cerrar aquellas páginas web que distribuyan sin licencia archivos protegidos por derechos de autor. El presidente de Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hizo ayer nuevamente de apagafuegos y aseguró en una conversación con los periodistas que la solución a la polémica está «cerca».
El jefe del Ejecutivo insistió en que el plan para que una autoridad administrativa clausure aquellas webs que no respeten la propiedad intelectual forma parte de un anteproyecto de ley, por lo que no es definitivo y en consecuencia está sujeto a modificaciones. Así, pidió calma a la espera de que se revise el proyecto de Ley de Economía Sostenible y se mostró convencido de que habrá espacio para dialogar y encontrar una salida llegando a consensos. «Habrá una solución y será positiva».
El posible cierre de portales de Internet y la posibilidad de que esa decisión se deje en manos de una comisión administrativa y no por autorización judicial, ha concitado el rechazo de buena parte de las formaciones parlamentarias, desde la izquierda hasta el Partido Popular.
Rajoy no cede
El líder de los populares, Mariano Rajoy, siguió ayer precisamente con su cruzada contra la iniciativa. «Lo que hay que hacer es menos leyes, menos decretos y menos meterse en la vida de la gente», aseveró en Madrid antes de apuntar que las descargas en Internet con derechos de autor deben regularse, «pero de otra manera».
Rajoy consideró que si el Ejecutivo decide proceder mediante un órgano administrativo a cerrar páginas web estará atentando contra derechos fundamentales como la libertad de expresión, algo que «no te lo puede quitar un funcionario, eso es muy fuerte».
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