Su caída del año pasado cuando iba liderando la carrera sólo fue un lapsus, un despiste. Porque Casey Stoner volvió a mandar en el GP de Catar. El australiano sumó su cuarta victoria en el circuito de Losail en los últimos cinco años. Además, se convirtió en el primer líder del Mundial en la categoría reina. Un punto de inflexión para Honda, que no lideraba MotoGP desde que Dani Pedrosa se cayera en el GP de Alemania 2008.
Stoner tuvo su máximo rival en Dani Pedrosa, el único capaz de seguirle de cerca. Pero también el español encontró su némesis en otro rival, Jorge Lorenzo. El mallorquín, que venía de estar a más de dos segundos de las Honda en la pretemporada, mantuvo una batalla endiablada con Pedrosa por la segunda plaza, con adelantamientos contínuos entre uno y otro.
Pedrosa superaba al vigente campeón en las rectas mientras que Lorenzo le pasaba en las curvas.
Al final, fue Lorenzo el que ocupó el segundo cajón, siendo Dani Pedrosa, tercero. Un no tan buen resultado para el de Castellar que se había erigido como alternativa de Stoner durante todo el fin de semana
Claro, que Dani explicó en el parque cerrado la razón de su menor rendimiento en las últimas vueltas. Y es que el catalán tenía tanto dolor en un brazo que se le hacía difícil manejar el manillar de su RC212V. Un dolor que ya se le había reproducido en los entrenamientos pero del cual no dijo nada para no dar pistas a sus rivales.
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